Se sabe que una de las formas de diagnóstico de cualquier tipo de cáncer de seno se puede lograr mediante un sencillo método de auto examen. Así que no obvies la oportunidad de conocer tu cuerpo y detectar alguna anormalidad de manera temprana para prevenir los siguientes tipos de cáncer de mama:
El carcinoma ductal in situ
Este tipo de cáncer de mama se origina en las células de las paredes de los conductos mamarios. Se trata de un cáncer muy localizado que no se ha extendido aún a otras zonas del cuerpo causando metástasis. La tasa de curación para este tipo de cáncer es de un 100 por ciento para los expertos. La mamografía es el examen que permite su diagnóstico.
El carcinoma ductal infiltrante
A diferencia del anterior tipo de cáncer, éste se trata de uno que inicia en el conducto mamario pero que logra atravesarlo y pasa el tejido adiposo de la mama, lo que podría producir una extensión en otras partes del cuerpo. Se trata del carcinoma más frecuente de mama, se estima que se trate del 80 por ciento de casos de cáncer de mama.
El carcinoma lobular in situ
Este se origina en las glándulas mamarias y aunque no se considera necesariamente un cáncer, si puede hacer que se produzca uno, aumentando el riesgo notablemente. Usualmente se produce antes de la menopausia, a las mujeres que le padecen se les recomienda un continuo monitoreo de la enfermedad para evitar el cáncer de seno.
El carcinoma lobular infiltrante
Se trata de un tipo de cáncer de mama que comienza en las glándulas mamarias pero se puede extender y destruir otros tejidos del organismo. Se estima que entre el 10 y el 15 por ciento de casos son de este tipo. Aunque se trata de un cáncer de seno difícil de detectar, la mamografía podría identificarle con astucia, por eso se recomienda el monitoreo según indique el médico.
Según la OMS, el cáncer de mama es el más común entre las mujeres en todo el mundo, pues representa el 16% de todos los cánceres femeninos. No olvides el autoexamen puede tratarse de la salvación.